Si has soñado con hacerte rico con casas o con acciones, esta comparación entre bienes raíces y la bolsa te interesa. Te lo explicamos en cinco minutos, sin rollos ni tecnicismos, con un toque de humor.
La gran pregunta: ¿Qué ha rendido más?
Históricamente, la bolsa ha sido la campeona indiscutible. El S&P 500 ha tenido un rendimiento promedio del 10% anual (incluyendo dividendos), mientras que la vivienda ha subido entre un 4% y 8% anual. En otras palabras, la bolsa te hace ganar más rápido, pero también tiene más altibajos.
Pero espera, que no todo es tan simple.
Factores clave a considerar
- Volatilidad:
- Acciones = Montaña rusa. Cuidado con las curvas.
- Inmuebles = Viaje en carretera, con algunos baches.
- En 2020, las acciones se desplomaron un 33%, mientras que las casas bajaron solo un 3.4%. En ese momento pensarías que la bolsa no es lo tuyo. Pues nada más lejos de la realidad, son cosas que pasan!!
- Liquidez:
- Vender acciones: En un clic y listo, ya dispones del dinero en la cuenta corriente.
- Vender una casa: Prepara café, busca comprador, negocia, papeleo, y meses después… quizá la vendas.
- Costos de Mantenimiento:
- Inmuebles: Impuestos, reparaciones, seguro, y si es alquiler, lidiar con inquilinos que creen que la renta incluye reparaciones gratis.
- Acciones: Comisiones bajas o cero en plataformas modernas.
- Apalancamiento (el dinerito no lo pones tú, lo pone el banco):
- Con bienes raíces puedes comprar una casa con solo el 20% de tu dinero y que el banco pague el resto.
- Con acciones, el apalancamiento es más raro y riesgoso. No te lo recomiendo sino eres un experto.
- Impuestos y Beneficios:
- Inmuebles: Cuando vendes una casa en España, debes pagar la ganancia patrimonial en el IRPF, que se calcula sobre la diferencia entre el precio de compra y el de venta. También puede aplicarse la plusvalía municipal, un impuesto que grava el incremento del valor del suelo. Existen exenciones y reducciones si reinviertes en vivienda habitual o cumples ciertos requisitos.
- Acciones: Solo pagas por las ganancias al cerrar las operaciones.
Si no te decides todavía, te queda esta opción: REITs
Si quieres lo mejor de ambos mundos, están los Real Estate Investment Trusts (REITs), que te dejan invertir en bienes raíces sin ser dueño directo. Se compran y venden como acciones, dan dividendos más altos, pero sin el apalancamiento y las exenciones fiscales de una casa.